Tengo un amigo que se llama Albert Vicens, barcelonista de pura cepa y más catalán que el pan con tomate, que suele bascular más hacia el «seny» que hacia la «rauxa», y que, de vez en cuando, te suelta una sentencia de las buenas. Anteayer me lo encontré en una tienda, comprándose un casco de motorista. Debía de ser un momento de «rauxa». Albert y yo, cuando nos vemos, hablamos de política, de fútbol o de ambas cosas a la vez. Comentar la reciente victoria de la Roja era, pues, inevitable.
¿Catalanizar España o catalanizar la selección española?
per Toni Rodriguez Pujol
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