Una boya que aprovecha la fuerza de las olas para generar energía y cubrir las necesidades de embarcaciones pequeñas y medianas, gana el primer premio del Engihack, dotado en 3.000€, el maratón de la ingeniería, que se celebró el pasado sábado en el Museo Nacional de la Ciencia y de la Técnica de Catalunya, en el marco del 160 aniversario de la Asociación d’Enginyers Industrials de Catalunya.
Este proyecto, del equipo Renergy con estudiantes de la Escuela Técnica Superior de la Universidad Rovira i Virgili y de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Industrial de Barcelona (ETSEIB) de la Universitat Politècnica de Catalunya, fue considerado por el jurado el “más creativo, original, aplicable, y con una buena visión global, escalable y con más detalle tecnológico”, de los 19 que se presentaron en la competición.
Engihack fue una gran fiesta de la creatividad, el talento y las ideas, una oportunidad y un punto de encuentro, entre los futuros ingenieros e ingenieras de las escuelas de ingeniería del ámbito industrial catalanas y las empresas referentes del sector (ABB, AGBAR, BSM, CELSA, Consorcio de la Zona Franca, FGC, NATURGY, SEAT, la Caja de Ingenieros y la Mutua de los Ingenieros).
Cerca de un centenar de estudiantes de ingeniería, trabajando en grupos, dispusieron de 12 horas intensas para encontrar las soluciones más innovadoras y efectivas en los 6 grandes retos mundiales actuales planteados: la energía, la emergencia climática, la transformación digital, la salud de las personas, la industria innovadora y la construcción de una sociedad justa. Pere Homs, director general d’Enginyers Industrials de Catalunya, destacó que «uno de los objetivos del Engihack es hacer entender a los jóvenes ingenieros que deben formar parte de la solución de los retos de hoy«.
Hacer frente a la emergencia climática: nenúfares y techos retráctiles vegetales
El segundo premio de Engihack fue para una creativa solución para reducir la sequía a través de un sistema que minimiza la evaporación del agua de los pantanos. En concreto, el proyecto de Techsynergy con miembros del IQS Barcelona y de la ETSEIB, consiste en unos nenúfares que se encargan de hacer sombra en el agua, al tiempo que hacen recircular el agua más profunda (que está más fresca ) para enfriar la de la superficie.
El equipo Can t’implora, formado por estudiantes de la ETSEIB, se llevó el tercer premio con un proyecto de techo retráctil vegetal para hacer sombra y refrescar las calles de las ciudades. La solución consiste en un mecanismo que permite tapar y reducir el calor del asfalto de las calzadas, haciendo más sombras, y al ser retráctil tiene un fácil mantenimiento y se puede retirar en invierno o por la noche. «Parece mentira que no se haya inventado hasta ahora«, recogió el acta del jurado.